Diprogenta en el embarazo (categoria C de la FDA)
En estudios animales ha producido daño fetal y no hay estudios adecuados en mujeres embarazadas. O bien, no se han realizado estudios en animales ni en humanos. Sólo debe administrarse en el embarazo si el beneficio justifica el riesgo potencial.
No se dispone de información adecuada sobre la utilización de voriconazol en mujeres embarazadas. Los estudios en animales han demostrado toxicidad sobre la reproducción. Se desconoce el posible riesgo para humanos. Voriconazol no debe utilizarse durante el embarazo a menos que los beneficios para la madre superen claramente a los riesgos potenciales para el feto. Las mujeres en edad fértil deben utilizar siempre métodos anticonceptivos eficaces durante el tratamiento.En estudios de reproducción, voriconazol demostró ser teratogénico en ratas y embriotóxico en conejos con exposiciones sistémicas iguales a las obtenidas en humanos con dosis terapéuticas. En el estudio de desarrollo pre y posnatal en ratas expuestas a dosis más bajas que las obtenidas en humanos con dosis terapéuticas, voriconazol prolongó la duración de la gestación y del parto y originó distocia con la consecuente mortalidad materna y menor supervivencia perinatal de las crías. Los efectos sobre el parto están probablemente mediados por mecanismos específicos de especie, implicando reducción de los niveles de estradiol, y son consistentes con los observados con otros antifúngicos azólicos.
El principio activo es el siguiente: Voriconazol